viernes, 25 de junio de 2010

Rememorando a Luispi: Pijamas

Y al decir "noches", me asalta una duda que me mastica el alma y me entumece el espíritu... Ni los padres próceres de la Humanidad ni los sabios de Grecia han atinado a resolver: ¿Cada cuánto hay que echar a lavar un pijama? ¡Eso no lo saben ni las madres!
No sabemos nada de los pijamas. ¿Qué sabemos? Que son para regalar... y que no sirven para dormir. Los botones no te dejan, que se clavan. Se han dado casos de gente que se ha quedado dormida y se los han tenido que extirpar.
Yo creo que si tuviéramos que comprar nuestros propios pijamas, los elegiríamos sin botones. Pero como son un regalo, decimos: "Es pa' otro.Bah! Que se joda!". Por esa regla de tres podrían hacer, para regalo... ¡tampax de mimbre! Son pa' otro...
Por eso los jóvenes tenemos nuestros propios pijamas: el
calzoncillo y la camiseta vieja. Sí, es uno de los logros de nuestra generación, meternos en la cama con cualquier cosa.
El problema es: ¿Vale cualquier camiseta para camiseta de pijama?
¿Cómo se elige una camiseta de pijama? ¿Ha de tener alguna virtud?
Sí! Tiene que ser fea. Como de propaganda de comercia local: "Andamiajes Corrochano", ¡perfecta! Esa la tocas y ya te entra sueño...
Pero hay otra vía para que una camiseta llegue a camiseta de pijama...
Una noche, se queda tu novia a dormir en tu casa, coge tu camiseta favorita, la de Britney Spears, y con total impunidad te dice: "¡Te cojo esto pa' dormir!" Y duerme con ella. Y esa camiseta ya no vuelve a ser la misma.
En cuanto una camiseta pasa una noche como camiseta de pijama... pierde la inocencia... se queda como triste... La miras y dices: "Britney, te veo mala cara". Y te dice: "Ya, es que he pasado mala noche...".
Claro, por eso hay que conocer muy bien el "ciclo de vida de la camiseta": ¿Cuántas veces hay que ponerse una camiseta para que pase a camiseta de pijama? ¿Y cuántas noches ha de pasar como camiseta de pijama para que pase a limpiar cristales? Y lo que es más triste: ¿Cuántos cristales ha de limpiar una camiseta de pijama para que pase a trapito de los zapatos? Que eso ya es lo último, es poner la camiseta a la altura del betún.
Para evitar todo esto, yo creo que deberíamos dormir todos, y podemos,con el Cadillac de los pijamas: el esquijama.
El esquijama es como un chándal... pero no tan elegante. Es como un chándal hecho con tela de gamuza para limpiar las gafas. Los hay tan transparentes, que ves a través. Tú miras a un señor con esquijama y le dices: "En todo momento sé dónde lo tienes todo". Los hay tan finos que no es que veas a través de la tela, es que ves a través del señor... En los hospitales se podrían ahorrar las radiografías: "Creo que tengo una piedra en el riñón, ¿me hace usted una radiografía?". "No hace falta, póngase un esquijama"
Luego, claro, el esquijama, tiene una debilidad: la goma de la cintura. Esa goma fláccida, que esta flácida ya desde el primer día... Los esquijamas los deberían vender con tirantes. Sí porque, es tan flácida, que se te caen los pantalones aunque estés tumbado en la cama. Sin embargo, las gomas de las muñecas son como grilletes... vas con las manos azuladas... Que dice: "Cariño, te veo más moreno". Y dices: "No, son las gomas del esquijama". Y aquí hay que hacer una puntualización. Vamos a ver... no es que el esquijama sea malo... Es la sociedad, que lo corrompe. El problema es que lo corrompe siempre por la misma zona: por la entrepierna. Se hace el agujerito... Ese agujerito... ese agujerito es como el ego de los actores: cuanto más lo tocas, más grande se hace. Es un peligro porque te quedas dormido toqueteando el agujerito, y cuando te despiertas te queda nada más que las gomas de las muñecas.
Yo, en mi afán de investigación, he llegado a dormir con camisón. Me decía mi madre: "Luisiño, ¿qué haces con el camisón". "Madre, afán de investigación". Y el camisón es lo más incómodo que hay para dormir. Te metes en la cama y se te sube hasta los sobacos... se te queda de bufanda.
Pero esto no es lo peor. Lo peor es cuando te quieres dar la vuelta... porque te estruja... Te hace un estrangulamiento aquí, a la altura de la cintura... Es lo denominado como "efecto Twister". Es un peligro porque si insistes, insistes e insistes... Hay gente que se ha llegado a dividir en dos... mitosis se llama... Investigando, yo he hecho la prueba, y la única manera de darse la vuelta con un camisón, es esta: abrir mucho las piernas para que se tense la tela. Y entonces empezar a dar botecitos, y cuando has cogido altura suficiente te das la vuelta como una tortilla.

Pero mucho cuidado con caer encima de un señor con pijama porque te clavas en sus botones y te mueres. Se han dado casos.

lunes, 15 de febrero de 2010

¿Dónde está tu victoria?

Hoy, en la localidad de León se ha sufrido una terrible perdida. Ayer, Domingo 14 de Febrero de 2010, falleció en la localidad de Cistierna un niño. Un niño muy querido por todos. Un niño famoso, gamberrete y algo abusón cuando debía serlo. Pero frente a las adversidades fuertes y los amigos tal vez sea una de las personas más valientes que he conocido. Tenía once años, ya alcanzaba la adolescencia, pero Dios se lo llevó demasiado pronto. A veces pienso que Dios nos arrebata a las personas más queridas de todas, pues pocos niños serían tan queridos como éste por todo el mundo: sus amigos, su familia, sus profesores... Pero cuando pienso en lo que me ha dado Dios, me viene a la cabeza que mi querido amigo ahora está con él, disfrutando antes que todos nosotros de la vida eterna que Dios no tardará en darnos. Puede que fuera demasiado pronto, tal vez pensemos que Dios no existe, o que no hace lo que tiene que hacer. Si, no tenemos pruebas de que exista. ¿Quién nos asegura que después de la muerte hay algo más? Pues nos lo asegura él, nos lo asegura éste desgraciado niño, nos lo aseguran los seres queridos de los que ya no podemos disfrutar como sus nietos, hijos, padres o hermanos... pero sobre todo os lo aseguro yo, en el que seguramente no tengáis mucha confianza, y es normal. Pero tal vez la tengáis en vuestros antepasados, en vuestros familiares o en los amigos fallecidos. Por eso esta entrada se la dedico a Rubén, que desde el cielo me está pidiendo perdón por todas sus maldades hacia mí, y perdonándome por todas las mías hacia él; y finalmente cierro ésta entrada dicíendole gracias atrasadas por su compañía en la Tierra, y otras adelantadas por la que pronto compartiremos en el cielo.

domingo, 8 de noviembre de 2009

Rememorando a Luispi: Juguetes de playa

Señoras y señores, yo tengo la prueba irrefutable de que Dios no existe. Porque un ser todopoderoso no puede permitirse una chapuza como el cubo, la pala y el rastrillo. El cubo. Da igual de qué lo llenes, de agua, de arena o de lo que quieras, el asa no dura ni quince segundos. De hecho no importa si no lo llenas, con solo el peso del aire el asa ya se parte. Por eso en las tiendas lo venden con una red, porque si coges el cubo con la pala y el rastrillo dentro te quedas con el asa en la mano. Y las palas. El verano es para descansar, ¿no? Y a los niños les damos una pala y un rastrillo y ¡ala, a cavar zanjas! ¡Sólo falta que les demos un botellín de Mahou!


Luego las colchonetas hinchables. Eso puede ser el fin de la humanidad. Un ser humano adulto, una colchoneta hinchable y una frase terrible: "Va, eso lo inflo yo". Empiezas con mucha ilusión... y la colchoneta ni se inmuta. Sigues... y según la colchoneta va cogiendo forma, tu vas perdiendo color. Sigues... y cuando ya casi está, pierdes el conocimiento y el aire que habías metido se vuelve a meter dentro de ti (hay casos reales de gente que ha explotado), y nada, tu no puedes evitarlo, vas metiendo más y más aire, y lo único que puedes hacer es meter la lengua en el pitorro. Y se acerca uno y te pregunta: "¿Estás bien?" Y tú "Ez pada indendad no gojed aide".


Sin embargo, las colchonetas inchables tienen una tecnología muy avanzada. Las hay con forma de huevo frito, con forma de mano, con forma de cocodrilo y con forma de todo. Hasta hay alguna con forma de teléfono móvil. Que se meten los niños en el agua y las madres "¡No os vayáis muy a lo hondo! ¡Que no hay cobertura!". Sin embargo todavía no han encontrado la manera de quitar ese borde cortante que tienen las colchonetas alrededor, que abrazas la colchoneta y te siega los brazos. Es un peligro. Estás nadando en alta mar, te corta los brazos, se te van al fondo, ¿y cómo vuelves? Es que yo me indigno, no es tan difícil, es una costura. Eso lo hace mi madre con los calcetines, luego se le da la vuelta, y ya está. Para mi que los hace el mismo señor que hace los flashes, estos helados que se congelan, se muerde para poder abrirlo, te rajan la comisura de la boca... y bueno.


También hay objetos muy chulos, que parecen ser juguetes playeros, pero no lo son. ¿Ejemplo? Está muy claro: el balón de Nivea. Seamos sinceros, ¿quién no ha tenido un balón de Nivea? Lo que ocurre es que solo vale para una patada. Lo mandas a tomar por culo, y mientras lloras por la desesperada pérdida de tu juguete, traes la alegría a otra familia que lo encuentra. Lo máximo habrá cinco o seis, ¡lo que pasa es que van de familia en familia!

Por último llegamos a las palas, un juego playero que es para que jueguen CHICOS con CHICAS. Porque si juegan CHICOS con CHICOS suena así: "¡Pom! ¡Pum! ¡Pom! ¡Pum! ¡Pom! ¡Pum! ¡Huy, mierda, la perdí!" Y si juegan CHICAS con CHICAS: "¡Uno, dos, tres! ¡Tres, un nuevo récooooord!" Lógicamente para jugar a las palas se necesita una pelota, la cuál tiene muy mala fama de perderse cada seis (dos por tres). Lo primero que debes de hacer en esos casos es buscar donde debería estar, en el último lugar donde la dejaste, preguntar si la han visto por ahí... y si no da resultado, como último y exclusivo recurso, podrías pedir consejo a ese ser todo poderoso que habita en tu casa: Tu madre. Por eso hoy les voy a definir, queridos espectadores, las tres típicas respuestas de madre:

-Mamá, ¿dónde está la pelota?
(PRIMERA RESPUESTA DE MADRE)
"En su sitio"

Bueno, tú vuelves al sitio y miras en el cajón, que es una mierdecilla tan enana en la que prácticamente no cabe la pelota. Y no está. Vuelta al sillón de tu madre.

-Mamá, no está.
(SEGUNDA RESPUESTA DE MADRE)
"¿Pero has mirado bien?"

Ya estás algo acongojadillo, pero vuelves una última vez como un niño obediente. Lógicamente no está. Y ya vas a dónde tu madre otra vez, como con miedo.

-Mamá, que..eeeh, ..e...
(ÚLTIMA RESPUESTA DE MADRE, LETAL Y DEFINITIVA)
-¡¿Qué pasa, que voy a tener que ir yo?!
Y la pelota se acojona, y aparece: ¡Plop!

Por eso, señoras y señores, yo les digo que Dios no existe. ¡Son los padres!



lunes, 17 de agosto de 2009

Tan sólo tres ducados...


Lo llebaban ya a la horca, en el centro de la Plaza Mayor. Había cometido un crimen horrible, nadie sabía cuál, solo que daba pena contarlo. Pasó por allí por casualidad la carroza real, en la que iba el rey con su mujer, a la que acababa de desposar en España. Contemplaron el barullo que había en la plaza y decidieron adelantarse para ver lo que sucedía. Al verlo con claridad, la reina se tapó los ojos. Pero justo cuando el verdugo iba a girar la palanca, el rey se adelantó, y le dijo al verdugo:

-¿Cúal es el precio para salvar la vida de este pobre insensato?

-La ley estipula que con 1000 ducados el hombre quedará libre, se cual sea el crimen.

Sacó el rey del tesoro real 700 ducados, y la reina añadió otras 50 monedas de su cartera.

-¿No bastan 750 ducados?-preguntó la bondadosa reina.

-La ley estipula que sean 1000- repitió el verdugo.

Entonces entraron en la plaza los caballeros del séquito real, y añadieron entre todos 247 ducados más. El verdugo los contó entre todos y anunció:

-No son suficientes. La ley estipula que sean 1000 ducados y aquí solo hay 997.

-¿Y por sólo tres ducados ahorcarán a este hombre?-intervino la reina.

-La ley estipula que sean 1000 ducados, no 997-contestó la fría voz del verdugo.

Pero entonces calleron del bolsillo del acusado varias monedas. Tres ducados para ser exactos, que junto a los 700 del bondadoso rey, los 50 de la piadosa reina y los 247 de los fieles caballeros del séquito real, sumaron 1000 ducados. Y el preso quedó libre, y fue acogido por los reyes en su valioso palacio, para vivir feliz y contento hasta el fin de sus días.


¿Y cuál es la moraleja de esta historia?

¿Quién era ese afortunado preso que fue salvado por la bondad del rey, la intersección de la reina y la piedad de los caballeros del séquito real?

¡Bien podría ser cualquiera de nosotros! Que, en el día del juicio final, seremos salvados por la bondad de Dios, la intersección de la santísima virgen y la piedad de todos los santos.
Pero todo esto no valdrá nada...


...¡SI NO LLEVAMOS CON NOSOTROS TRES DUCADOS DE BUENA VOLUNTAD!

lunes, 7 de julio de 2008

Ballenas en Vegamian




Nombre: Troll


Edad: ??? ¿¿¿


Historia: Su edad y partida de nacimiento se perdió hace miles de años. Todos ignoran su verdadera historia, pero cuenta la leyenda, que al enfrentarse al Rey de las nieves, fue herido de muerte. Pero apareció un genio (sí, de los de la lámpara) que le concedió el deseo de vivir, a cambio de que superase cinco pruebas de una astucia letal. La primera fue ir a Egipto y cortarle la nariz a la esfinge. La segunda, ir al Paleolítico (en una máquina del tiempo) para crear el fuego. La tercera ir a Grecia y cortarle los brazos a la Venus de Millo. La cuarta, con la máquina del tiempo, planear el asesinato del presidente Kennedy en el futuro. Y la última, domar a una gigantesca ballena en el mar Atlántico. En esta última, el troll pereció, dejando su memoria perdida para siempre. Sesenta años después, el pueblo de Vegamian, en León, es inundado. Y en el inmenso valle sobre el que hace sombra el Monta Pardomino, aún hoy día se ollen los berridos de una ballena... lo que revela el sitio de su fallecimiento.

sábado, 29 de diciembre de 2007

La Caja de S. Patricio

En un cristalino lago de Nueva York, un joven llamado Tex Ryan tira unas piedras al agua para intentar hacer ranas. Mientras tanto, en un estrecho callejón de Washington, otro muchacho llamado Peter Fifde (quinta piedra) sueña con encontrar La Caja de San Patricio, una gran caja vista por el exterior, que en el interior no contiene otra cosa que el más profundo deseo de nuestro corazón. Al ser ya mayores, junto con su amigo Jack, se adentran en el mundo de los clones, en busca de la mística caja. Sin separarse de Jane (la hermana de Jack), el emperador Randy, el coronel Shun, el "mutante" Kanay-dûm, el metamorfómago Randall, el príncipe Bill y un extraño amuleto, un colgante de 18 kilates, Tex y Peter emprenden la búsqueda de Fayrlandia, la ciudad de los sueños, donde les espera el General Right, un antipático robot que posée un portal mágico que hace que solamnte una person pueda comunicarse con La Caja de San Patricio, reservando su segundo deseo para pedírselo cuando la vea en persona. Sufriendo muchas muertes, y luchando sin parar contra sus enemigos Ronan, Mushroom, Right y el poderoso e inmortal Caballero negro, la compañia unida, aliada hasta un punto con el general Right, se pregunta:

¿Qué peligros nos aguardan ahí dentro y quienes serán lo bastante poderosos para superarlos?

Descúbrelo el 16 Diciembre del 20??.